Pulso el botón de llamada del ascensor. A los pocos segundos, clinc, el avisador anuncia la llegada de la cabina. Se abren las puertas y entro. Como siempre, al mirar el cuadro de mandos, dudo. La disposición de los pulsadores o sensores de los pisos acostumbra a ser diferente y mis dedos siempre tienen la tendencia a irse a pulsar la tecla de alarma. Pulso el 0. Me sitúo justo en medio, para equilibrar pesos. Las puertas se cierran. Empieza el descenso. Como casi siempre miro a la parte superior de las puertas. Dos pisos más abajo se detiene. Clinc. Las puertas se abren. Aparece un chico de veinti pocos, bien parecido, muy bien parecido. Doy un paso atrás. El entra. Yo balbuceo algo como “mmuu” a modo de saludo. Re-pulsa el botón del 0 y se aparta ligeramente de la botonera. Me da la espalda. Un aroma me llega. Como de estas cosas no entiendo, no se si es de desodorante o de colonia o de ves a saber que es, pero de lo que estoy seguro es que ni es pachuli ni es mi desodorante. Volvemos a bajar. Mentalmente canto “Que se pare, que se pare”. Cuatro pisos y clinc. Se abren las puertas. Entra una mujer, de mediana edad. El chico se desplaza a mi derecha y da medio paso hacia atrás, para dejar sitio a la nueva viajera. Esta pulsa su destino y se queda situada perpendicularmente a nosotros. El aroma me llega más. Mis ojos van desde el pelo liso del joven, al indicador de los pisos y se cruzan con los de ella. Ella me sonríe. Yo devuelvo la sonrisa y mis ojos huyen de los suyos. Mi mente infantil vuelve a la carga: “Que se baje, que se baje.” Clinc.. 4º Piso. Ella se baja. Yupii!!! Las puertas se vuelven a cerrar. Los dos nos quedamos en la misma posición. Tengo su cuello a tiro. “Que se pare, que se”. Clinc. No me ha dado ni tiempo a acabar la cancioncita. Nos volvemos a detener. Oigo un sonido como “nich”, de desaprobación. Las puertas se vuelven a abrir. En el descansillo, nadie. Él, se mueve ligeramente, inquieto. Las puertas se vuelven a cerrar y nos ponemos de nuevo en movimiento. “Que se pare, Que se pare”, vuelvo a cantar internamente. Y se para. Alzo la vista. El 0 iluminado. Dibujo una leve mueca de desaprobación y me doy cuenta que él ya no está. Clinc. Se cierran las puertas. Noto el movimiento ascendente. Ya no hay canción interior. Sin saber donde voy, me quedo absorto en un “multiple choice”. ¿Qué hubiera o hubiese hecho en ese cuello embriagador? a) lamerlo. b) besarlo. c) morderlo. d) hacerle un chupetón. e) combinaciones de a,b,c y d en orden aleatorio. f) sacarle ese punto negro que afeaba el panorama.
Necesito leer tus libros: Capítulo 142.
Hace 1 semana
9 comentarios:
Una narración donde la tensión se palpa en el ambiente. Creo que todos hemos vivido alguna vez una situación por el estilo, claro que muy pocos sabrían narrarla con tal grado de espectación.
A mí, cuando me pasa algo así me olvido por un momento la aversión que le tengo a los ascensores.
Un beso.
Yo creo que lo mejor habría sido f) para dejar la zona más lamible, y luego la combinación de las demás, ya como te lo fuera pidiendo el cuerpo (el propio o el ajeno).
Besos elevadores.
Asi que yo tengo una familia de tontos, cari, pero tu tienes: "Mi mente infantil"??? jaja pues nuse que es peor.
Bueno, me encantan los cuellos largos, creo que haría un buen drácula. Es de los trozos del ser humano que mas me erotizan...
Y vamos, que no, que no me quieres nada... jaja
Bezos
Buen relato Chevy, volvimos a la cordura, después del traspié de la lucha entre. . .bueno, eso!
Yo le hubiese hecho el multiple choice completo, para no equivocarme.
BESOTES GUAPO
¡¡La opción g), por supuesto, Chevy¡¡: Decirle: ¿En tu depa o en el mío?" jajajaja
Excelente historia, muñeco.
Besitos de ascensor.
^_^ yo voto por ninguna... le harías de todo menos esas. jijiji
Arrumako:Yo añoro los ascensores de una de las torres gemelas. Eran rápidos, hasta se notaba la aceleración.
Theodore:Si, pero .... cuando empiezas con uno ....
Thiago:Tienes razón, aún estoy en la época pre-puber. El siguiente paso, la edad infantil. Yo voy hacia atras.
Stanley Kowalski:Por mucho que insistas, el combate fue ese y ahí quedo. Yo solo fui un espectador de segunda fila (nunca mejor dicho).
Juan DeDios Davila:Así, sin más, a saco. Ni un simple "HolaQueTal". Insisto, lo de muñeco, touché.
Marc Carreras:Mi imaginación es limitada y solo queda la opción de estrangularlo, no se que mas se podria hacer. Help me.
A lot of thanks for everybody, with love.
Kisses
ADVERTENCIA: Que a nadie se le ocurra entrar en el youtube y hacer la búsqueda "punto negro". Puede cambiar su sabia elección en el "multiple choice".
Cari, ves? con tanta coñita con el idioma y ahora me han dejado un comentario en italiano y no me kosko... ¿tu tb. sabes italiano de Oxford de esos? jajaaja
Bezos
Entre el italiano y tu, creo que hoy me voy a volver loco, jaajaj no sé que le pasa a todo el mundo en la boca, pero no me entero de nada, tu crees que al italiano tengo que mentarle a su madre o darle las gracias, jaajaj
Por dios llevo una racha rarísima, si hasta tengo mi propio troll, uno que me dice que mi blog es una mierda y que me suicide.... ¿no serás tu, no? Ahora que lo pienso, jaajaja
Te llevas muy bien con Theodoro, ehhhh, ya veo ya... Mucho quererme a mi, pero luego te enrrolas con cualquiera, jajajaaja.
Bueno, venga, a ver que mirada no vista, que polvo no echado, que noviazgo no empezado, que polla no comida, que insulto no dicho, que ostia no dada..... nos cuentas mañana, jajaja
Bezos.
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